Cada pulsera que ves aquí, la tejí con el alma en las manos.

Cada pulsera que ves aquí, la tejí con el alma en las manos.

No diseño para seguir una moda. Diseño para expresar lo que a veces ni yo misma puedo poner en palabras.

Cada una de estas pulseras nació en un momento distinto de mi vida: algunas cuando necesitaba calma, otras cuando me sentía invencible, otras cuando simplemente quería jugar con el color y dejarme llevar.


Trabajo con mostacillas Miyuki porque amo su precisión, pero también porque me obligan a estar presente. No hay máquina, no hay atajo: solo mis manos, mi respiración y el patrón que se va revelando de a poco, como un susurro.


Uso técnicas como peyote, telar, cuadrado y bordado con alambrismo, no para lucirme con lo técnico, sino para traducir emociones. A veces las mezclo porque así también soy yo: mezcla. No lineal. Contradictoria. Cíclica.


En algunas piezas busqué refugio (como la Pulsera Paz Moderna o la Movimiento Sutil).

En otras, simplemente quise celebrar la vida (como la Lúdica Diario o la Prisma Geométrico).

Hay pulseras que hablan de raíces (Kilim, Tierra Viva, Cuero Elegante) y otras que nacen del puro deseo de atreverme (Arte Textil, Improvisada Viva, Triple Inspiración).


Todas tienen algo de mí.

No solo mi gusto estético, sino también mis silencios, mis duelos, mi intuición, mis momentos de goce.

Cada puntada es un segundo en el que estuve ahí, acompañándome.


Hoy, están aquí para acompañarte a ti.


Porque una pulsera no es solo un adorno. Es una declaración de quién eres en este momento.

Y si alguna de estas resuena contigo, quizás es porque también está contándote una historia que ya conoces.

Regresar al blog

Deja un comentario

Ten en cuenta que los comentarios deben aprobarse antes de que se publiquen.